Bodas de Invierno

Estos últimos años ha sido tendencia casarse en los meses de invierno, y queremos contaros algunas ventajas de estas bodas tan peculiares.

Es cierto que al tratarse de meses de invierno el tiempo puede jugar una mala pasada, pero la verdad es que al vivir en una zona tan privilegiada como Alicante podemos jugárnosla y hacer una boda diferente y fuera de lo común. Está claro que tratándose de esta temporada si tenéis un plan B ¡muchísimo mejor!

Cuando organizamos una boda, podemos sudar la gota gorda con los preparativos. Además hemos visto muchas bodas en pleno verano donde los novios han pasado bastante calor, porque al final entre las capas que lleva el traje y el vestido y el sol apretando desde arriba es inevitable ponerse a sudar. Así que los meses cómo diciembre nos ayudarán a sacar la mejor de nuestras sonrisas, sin esos brillos indeseados en la piel.

También queremos hablaros de la luz, ya que podemos celebrar la ceremonia en el exterior y la verdad es que la luz de las mañanas en invierno es increíble. En los meses más calurosos del año contamos con una luz muy dura, que a veces genera sombras indeseadas. Pero cuando se trata de invierno la luz es indescriptible. También hemos realizado bodas con el cielo nublado y el resultado simplemente nos encanta. Contamos con una luz muy suave y cuando asoman algunos rayos de sol las fotos son preciosas.  Es recomendable si te casas en estos meses, que la boda sea por la mañana, porque así podrás disfrutar de bastantes más horas de luz.

Y todo esto, por no hablar de los looks que pueden llevar nuestras novias… ¿Qué os parecería casaros con una capa? ¿O con un vestido elegante con mangas y espalda descubierta? Lo cierto es que hay miles de combinaciones para poder adaptar un vestido de novia a los meses de invierno,  y a cada cual más espectacular.  Porque el sector nupcial está en constante evolución y uno de sus puntos fuertes es la creatividad, y no hay nada más creativo que adaptarse a las alternativas del frío y seguir luciendo radiantes.

Hemos mencionado la luz natural pero también es cierto que en las bodas de invierno da muchísimo juego poder jugar con luz artificial. Poder llenar la zona del banquete con microbombilla es algo que llenará de magia tu boda. Incluso aunque no se trate de una zona exterior, podéis encontrar salones preciosos y llenos de naturaleza.

En algunas ocasiones las wedding planners lo que recomiendan a las parejas es celebrar la ceremonia en una zona exterior y a plena luz del día, y después podréis continuar con el banquete en algún salón cubierto y protegidos del frío. Y para la barra libre también puede quedar muy bien una zona con pérgolas, ¿no crees?

En definitiva, si tuviéramos que apostar por bodas de invierno o bodas de verano, sin ninguna duda nos decantamos por las primeras. Contaréis con un ambiente y una magia especial, ni novios ni invitados tendrán que sudar bajo el sol abrasador del verano,  las novias podrán ir espectaculares y diferentes y además, podréis combinar espacios al aire libre con espacios en interior.